Ayer tuve unos de esos días en los que necesite respirar profundo muchas veces para no pegar un grito o mejor dicho echarme al llanto…..En la mañana se fue mi esposo de viaje de trabajo, fui a dejar y recoger a Camila al colegio y regrese a la oficina, entre una reunión de un lado de la ciudad al otro empecé a recibir mensajes de texto de la nanny diciendo que no se sentía bien y que hoy era su ultimo día. Imagínense mi angustia cuando ella estaba con mis dos hijas!!! no hice otra cosa mas que cortar la reunión (ya eran las 5 pm) y correr a la casa cuando literalmente la nanny tenia las maletas en mano y esperándome en la puerta para irse.
Me sentí triste y traicionada – Aunque no tenia tanto tiempo con nosotros ya la sentíamos como de la familia! si sabia que se iría eventualmente (tiene 26 años y con novio nuevo) pero no supuse que tan rápido. Bueno, después de darles de comer, empijamarlas y dormirlas , me senté en la computadora a ponerme al día en mil pendientes. A la 1 AM empieza Paulina enferma devolviendo el estomago sin parar….luego se despierta Camila y sigue los pasos de su hermana. Mi noche se convirtió en una orquesta de llanto, quejidos, sabanas, pijamas y alfombras sucias…y yo queriendo llorar!!! Así estuvimos hasta las 6 AM cuando logre que votaran todo lo que tenían en el estomago y se quedaran dormidas – obviamente después de limpiar todo. Que les había pasado? resulta que hay un virus andando -que por cierto yo también lo tenia pero no tuve tiempo de hacerle caso a mi malestar al ver a mis chiquitas sufriendo. Pues si, hoy no les puedo dar muchos consejos sino que las necesitaba para desahogarme y contarles de mi día! Me imagino que han tenido algún día así o peor no?