El maltrato físico ocurre cuando una persona intencionalmente lastima o pone en peligro a alguien más.

Muchas veces es difícil reconocer que estás experimentando abuso físico. Sin embargo, si tu pareja ha hecho una o varias veces alguna de las siguientes tácticas de abuso ¡está alerta! Puedes estar siendo víctima de abuso físico:

• Halar de los pelos, puñetazos, bofetadas, patadas, mordidas o asfixia.
  • Prohibir comer o dormir.
  • Hacer daño con armas.
  • Prohibición a la hora de llamar a la policía o la búsqueda de atención médica.
  • Hacer daño a los hijos.
  • El abandono en lugares desconocidos.
  • Conducción temeraria o peligrosa cuando se está en el coche con la persona.
  • Obligar a usar drogas o alcohol (especialmente si has tenido un problema de abuso de sustancias en el pasado)