Entre nuestra familia, reuniones de trabajo, compromisos sociales y diligencias, muchas veces llegamos a casa exhaustas y lo último que quisiéramos hacer es ejercicio, a pesar de nuestro horario tan apretado y falta de energía nunca debemos dejar de cuidar nuestra figura y salud.
Te aconsejo caminar todos los días 20-30 minutos, cuidar lo que comes y seguir esta guía practica de 5 movimientos que te ayudarán a ejercitarte mientras estas en la oficina. Te aseguro que este pequeño sacrificio cambiara tu día a día ¿Lista?
Apunta y baja (30 repeticiones): recárgate por completo en tu silla y siéntate derecha. De preferencia, haz cada uno de estos ejercicios con flats. Apoya tus pies en el suelo, rodillas separadas a la altura de la cadera y baja y sube tus piernas con las puntas de los pies. Concéntrate en hacer presión en la pantorilla. Además de hacer fuerza, estimularás la circulación de tus piernas principalmente.
Abdomen plano (3 series, 10 repeticiones): En la misma posición, aprieta el abdomen y contrae. Levanta la pierna derecha doblada 10 cm. del suelo, súbela y bájala. Debes concentrarte en hacer el esfuerzo desde el abdomen y no solamente en el muslo. Cambia de pierna y repite.
Estira y sostén (3 series, 15 repeticiones). Para evitar calambres, mantener tu elasticidad y darle una mejor circulación a tus piernas, este movimiento no te fallará. Levanta la pierna derecha en una línea recta, sin recargar tu muslo sobre la silla. Mantenla arriba por 15 segundos, con pequeñas pulsaciones hacia arriba y hacia abajo. Recuerda apretar abdomen y glúteos y cambia a la pierna izquierda después de 3 repeticiones.
Glúteos firmes (20 repeticiones): Espalda derecha y abdomen dentro, ahora es el turno de tu derrière. Aprieta fuerte tus glúteos y apoya tus talones lo más que puedas hacia el piso. La idea es que hagas fuerza en la parte trasera al igual que en los músculos abductores de las piernas.
Estira (10 segundos por extremidad): Tus piernas y glúteos no son los únicos que sufren. Además de hacer estos movimientos dos veces a lo largo de tu jornada de trabajo, estira tu espalda y brazos. Lleva los hombros lo más atrás que puedas y gira tu cabeza hacia los lados y de manera inclinada. Relaja el cuerpo, levanta el brazo derecho y dóblalo hacia tu espalda. Sostén el codo con el brazo contrario y cambia