Es normal que la mayoría de los hombres se sientan un poco inseguros a la hora de cuidar a los niños, les da miedo hasta cambiar un pañal porque sienten que pueden hacerle daño al bebe. Se que muchas veces te puedes sentir un poco presionada con la carga de la casa y de tus hijos, o capaz sientes que tienes toda esta responsabilidad sobre tus hombros. Aunque les parezca difícil o muy complicado, hay maneras de lograr que tu esposo se comprometa mas con las tareas del hogar y la crianza de los niños. En este post, les quiero compartir algunas ideas que me han ayudado a que mi esposo se convierta en una gran ayuda para mi:
Se clara al hablar
Ten una conversación seria con el y explícales con todo detalle en qué y cuándo necesitas ayuda. Por extraño que parezca, muchas veces ellos no tienen ni idea que necesitas o como te pueden ayudar. Es muy importante llegar a un acuerdo entre las actividades que aceptamos y que la responsabilidad de un hijo es de ambos. Comienza por darle la oportunidad de que te ayude con las tareas básicas, tu eres la encargada de hacer que el padre se involucre mas en el cuidado y la crianza de tus hijos.
Involúcralo desde el embarazo
Si estas embarazada, ¡es el mejor momento para empezar a crear responsabilidades en el! Nosotras como madres vivimos una experiencia completamente diferente desde que el bebé está en nuestro vientre. Los hombres por otro lado tienen una película completamente diferente, esa que permitimos que vivan. Háblale de lo que sientes, de cómo son todos los días de tu embarazo, de las emociones. Hablen de todo. Vayan a las citas médicas juntos, lean libros sobre el desarrollo del bebé, deja que sienta las pataditas y anímalo a hablarle a tu pancita, ¡Le motivará mucho cuando se dé cuenta que su hijo reconoce su voz!
Haz que se sientan útiles
Es normal que como madres seamos un poco sobreprotectoras y pensemos que nadie cuidara a nuestros hijos de la manera como nosotras lo hacemos, mas aun si son bebes. Si la crianza es entre dos, debemos darles la oportunidad para que puedan aprender a poner un pañal, vestir a un niño, llevarlo a la escuela. Puedes empezar por pedirle ayuda; si lo vas a cambiar dile que te pase el talco, el pañal, las toallitas, etc. Lo mismo para la hora del baño, haz que el escoja su ropita, motívalo para que lo cargue para pasear, etc.
Respeta su manera de hacer las cosas
Recuerda que tu esposo y tu fueron criados de maneras diferentes y cada quien tiene maneras diferentes de hacer las cosas. Es bien importante que nunca lo desautoricemos, habla con el para llegar a acuerdos sobre la crianza. Respetemos el resultado, sus molestias y el peinado no tan bonito que le toca a la princesa el día que la peina papá. Recuerda que si decidimos hacerlo todo nosotras porque somos las que sabemos, no nos quejemos después porque todo lo hacemos solas.