Tener un embarazo saludable no solo consiste en una buena salud física si no también en estar mentalmente tranquila, preparada y feliz. Por eso  te daremos estos consejos para que tu cuerpo y mente puedan trabajar en armonía y darle una hermosa bienvenida al nuevo miembro de la familia.

Comer y beber sano durante el embarazo:              

Una dieta sana incluye mantener una hidratación correcta esto significa que es fundamental beber mucha agua y leche para obtener calcio. La dieta debe ser equilibrada con alimentos altos en vitaminas y nutrientes pero no en grasas. También debe ser variada a base de verduras, legumbres, frutas y carnes para el aporte diario de proteínas.

Mantenerse activos:

Ejercitarse es importante para tu salud en general ya que te ayuda reducir el estrés y a la vez combatir con esas libritas / kilos demás. Mediante la realización de un ejercicio constante y moderado como la natación, yoga, pilates, caminar conseguiremos que mejore nuestra condición cardiovascular y muscular.

No faltar a las visitas médicas:

Visitar al ginecólogo es necesario para obtener una asistencia prenatal adecuada. En estas visitas estarás al tanto de la salud del bebé como de la tuya. También te puedes quitar cualquier duda que tengas y hablar con tu médico del plan de parto. Las ecografías y pruebas prenatales nos ayudaran a acercarnos al bebé y mantener sus primeros recuerdos.

Vestirse con ropa adecuada:

La comodidad en estos 9 meses de embarazo es esencial. Al estar embarazada tu cuerpo cambia,  por lo cual debemos tener la ropa adecuada. La moda de maternidad no tiene que ser aburrida, usa ropa que te haga sentir cómoda y a la vez mantengas tu estilo.

Cuidar nuestra piel:

Es fundamental utilizar crema solares protectoras y cremas antiestrías para prevenir manchas en la piel, quemaduras y las estrías que suelen aparecer durante el embarazo. Hidratar todo el cuerpo después de un buen baño nos regala un momento de relajación.

Descansar:

Hay que darle al cuerpo lo que necesita y si nos pide descansar, escúchalo.

Asistir a clases de preparación al parto:

Relacionarse con otras mujeres embarazadas y compartir conocimientos hace que tengas clara la mente de dudas. También sirve para adquirir información sobre las fases del parto, los cambio del cuerpo, la higiene del bebé y la lactancia. Sería muy bueno asistir a estas clases con tu pareja para que los dos estén al tanto de estos temas importantes.

Comunicarnos con el bebé:

Hay que hablarle al bebé, transmitirle tus sentimientos, ponerle música y conocer como es su evolución semana tras semana.

 Evita ir en contra de las recomendaciones de tu doctor y cualquier duda que tengas ¡haz la pregunta! Especialmente si eres madre primeriza es normal que miles de dudas y preguntas vengan a nuestra cabeza.